Los que nos seguís en Twitter probablemente recordéis que hoy hace una semana os hicimos nuestra particular crónica de las rebajas en directo desde el centro de Vigo. Fue entonces cuando se nos ocurrió la idea de preparar esta entrada con consejos útiles para ir a las rebajas, no morir en el intento y evitar que nos den gato por liebre.

A finales del año pasado cambió la normativa que las regulaba, por lo que actualmente los comercios pueden ponerlas cuando quieran y durante el periodo que les dé la gana, aunque por costumbre y tradición se siguen respetando más o menos los periodos rebajiles de enero y julio. Quizás por ese motivo este verano el comienzo de las rebajas ha sido algo más relajado que en años anteriores, ya que la mayoría de cadenas textiles las habían comenzado entre una semana y quince días antes del 1 de julio. Aún así, independientemente de la fecha en la que empiecen, los comercios han de hacer público en lugar visible las fechas de inicio y final de las mismas.

Además, la Ley de Comercio distingue entre rebajas, promociones, saldos y liquidaciones. Veamos qué significa cada cosa:

• Rebajas: productos de igual calidad que el resto de temporada, pero a mejor precio.
• Promoción: condición ventajosa respecto a otros períodos para incentivar las ventas.
• Saldo: productos con un precio disminuido debido a un desperfecto, deterioro u obsolescencia.
• Liquidaciones: ventas de carácter excepcional debido al cese de la actividad, traslados o similares.

 Aclarados los conceptos, procedemos con nuestros consejos:

• Unos días antes de ir de compras, piensa en lo que necesitas. Quizás te sea útil echar un vistazo a tu armario -y ya de paso, ponerlo en orden- para ver qué cosas desechar, cuáles todavía te sirven y cuáles pueden ser reutilizadas con un pequeño arreglo o regalándolas.
• Cuando tengas clara la diferencia entre necesidad y capricho, haz una lista como las de la compra. Fíjate una cantidad máxima a gastar y, si consideras que no te controlas con la tarjeta de crédito, déjala en casa y lleva efectivo.
• Si ya tenías en mente comprar algún artículo concreto, es recomendable que te pases un par de días antes por el establecimiento y compruebes el precio que tiene, no vaya a ser que luego se les de por «subir» el precio anterior en la etiqueta, a lo MediaMarkt style.
• Para evitar colas, aglomeraciones y estar más a gusto, evita el primer día de rebajas. Es preferible ir de lunes a jueves en horas de poca afluencia, como la primera hora de la mañana o la hora de comer (si se trata de un comercio que no cierre a mediodía). Si es en verano, en los días de calor la gente escapa a la playa y las tiendas quedan medio vacías, y algo parecido sucede en invierno los días de lluvia. En este último caso, es importante ir con un buen chubasquero y botas impermeables.
• Como la idea es la de probarse cosas, lo lógico es que vayamos vestidos cómodos, evitando prendas que sean complicadas de poner y quitar. Evita los cinturones y ponte zapatos sin cordones ni hebillas. Para las chicas es muy práctico ir en falda, pues te puedes probar pantalones sin tener que desvestirte.
• Evita ponerte cremas o perfumes y, aunque parezca de perogrullo, ¡dúchate antes de ir de compras! El que venga después a probarse lo mismo que tú no tiene por qué quedarse con tu aroma.
• Ahora es algo muy común que las tiendas no pongan en rebajas todo su stock, sino una parte, dejando el resto como «Nueva Temporada» (y para más inri, llaman Nueva Temporada a cosas que ya llevaban varias semanas en la tienda…). Fijaos bien, porque además tienen la costumbre de combinar burros de ropa de rebajas con los de nueva temporada al lado, a ver si picas.
• Comprueba bien las calidades, corte, tejidos, etc. A veces compensa más comprar algo que cueste 15€ pero con un tejido mínimamente bueno a algo que cueste 5€ y que sea de un tejido merdento de los que atraen pelusas o destiñe al primer lavado, o se desintegra al ponerlo 4 veces.
• Si vas a comprar zapatos, lleva un calcetín adecuado a la época en la que los vas a usar -o no lleves calcetines ni medias en caso de que vayas a por unas sandalias-. También es conveniente que te pruebes el par entero y andes bien con ellos un rato, para comprobar que no rocen en ninguna parte y sean suficientemente flexibles, no sólo que te sienten bien.
• ¡Mucho ojo con las etiquetas! Fíjate que indican el precio anterior y el actual. En caso de que sólo marquen el precio anterior y tengan una etiqueta con un porcentaje, pregunta primero a algún dependiente si el descuento ya está aplicado en la etiqueta o se hace en caja. También ten a mano el móvil para calcular el descuento, no vaya a ser que la caja registradora haga de las suyas…
• Además, según la ley no pueden venderse taras como artículos rebajados -tendrían que venderse bajo la denominación de Saldos o indicando claramente que se trata de Taras- así que fijaos que no tengan rotos, descosidos, les falten piezas -botones, corchetes- o tengan la cremallera estropeada.
• Una de las cuestiones que no ha cambiado con la nueva ley es que «Los artículos objeto de la venta en rebajas deberán haber estado incluidos con anterioridad en la oferta habitual de ventas». Vamos, que los comercios no deberían de aprovechar la ocasión para colarnos prendas de temporadas pasadas o de peores calidades confeccionadas expresamente para la ocasión.
• En rebajas dispones de los mismos derechos y garantías que durante el resto de temporadas. Eso sí, tanto en período de rebajas como fuera de él los comercios no están obligados por ley a hacer cambios o devoluciones con la excepción de un artículo deteriorado. Eso sí, han de indicar claramente en lugar visible si no aceptan cambios o devoluciones. Por si acaso, pregunta en caja antes de pagar.
• Guarda los tickets durante un tiempo prudencial por si surgiera algún problema. Recuerda que se aplica una garantía de 2 años a todos los artículos comprados nuevos, siempre que tengan algún problema de fabricación -no por desgaste debido al uso-.

Fuentes e información interesante:

• «Real Decreto-Ley 20/2012, de 13 de julio, de medidas para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad» Título V, que modifica la anterior normativa
• www.compraconcriterio.es