Hace unos días hablábamos del lío que tiene montado Audasa y hoy veremos qué posibles soluciones hay para nosotros, los consumidores. Como os comentábamos en el anterior capítulo de este culebrón, la Xunta parecía estar en pie de guerra contra la empresaria concesionaria de la AP-9. De hecho, el Instituto Galego de Consumo ha incluido en su web un apartado específico dedicado a este tema, en el que podemos encontrar desde información sobre las obligaciones de la concesionaria de la AP-9 hasta ejemplares de hojas de reclamación para exigir compensaciones por los atascos registrados.
¿Hay alguna iniciativa ciudadana al respecto? Pues descubrimos hace muy poco la existencia de una web, RecuperaTuPeaje.com, que denuncia las supuestas ilegalidades cometidas por Audasa y las autoridades y persigue la devolución de los importes de los peajes desde 2012. Esto que de entrada suena a movimiento ciudadano sin ánimo de lucro se choca de frente con la tarifa a pagar por formar parte de esta Asociación (ver apartado «¿Cuánto me cuesta asociarme?»), un mínimo de 30€ de entrada. Teniendo en cuenta que, tal y como indican en la web, buscan efectuar sus reclamaciones por vía administrativa y/o judicial si fuese necesario y la estrategia «implica un costoso juicio que durará varios años», parece comprensible que pidan unas tasas mínimas para participar.
Pero, ¿quién o quiénes están detrás de todo esto? En el apartado de preguntas frecuentes afirman que detrás de la Asociación de Usuarios de la AP-9 Final del Trayecto «hay ciudadanos y empresas que, independientemente de su ideología, están dispuestos a unirse para llevar a cabo esta iniciativa en beneficio propio y de todos los usuarios de la AP-9«, una definición muy vaga que deja poco claro el asunto, la verdad. Al consultar los estatutos de la Asociación figura como domicilio de la misma una dirección de Vigo que, curiosamente, coincide con la de un bufete de abogados. En fin, pienso que podría ser una iniciativa interesante para quienes tenéis que pagar el peaje a diario, pero el hecho de que no quieran dejar claro quienes están detrás de todo esto no deja de resultarme algo sospechoso.
Viendo el panorama, no parece que el asunto vaya a tener una salida rápida. Se podría decir que la AP-9 se encuentra en una situación de monopolio, ya que no podemos considerar a la N-550 una alternativa válida para trayectos largos ni mucho menos para soportar el tráfico de todos los vehículos que recorren a diario la autopista. La concesionaria se felicita por sus resultados, obtenidos a base de recortar en personal y subirnos las tarifas, ofreciendo así un servicio deficiente a precios estratosféricos. Las autoridades parecen más interesadas en lanzar pullitas populistas que quedan muy bonitas de cara a las próximas elecciones, pero no se atreven a poner cartas en el asunto. Por el momento, los únicos logros obtenidos (el trayecto Vigo-Morrazo gratuito y la gratuidad del viaje de vuelta entre Vigo y Pontevedra para los clientes del telepeaje) han resultado ser meros parches. Como véis, si no se pone solución, muchos peinaremos canas (muchas) cuando la expire la actual concesión de la AP9 a Audasa.
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