Las compañías de telecomunicaciones tienen departamentos de bajas cuyo objetivo primario no es tramitarle la baja a los usuarios, como podríamos imaginar, sino evitarlo. Para ello ofrecen descuentos y todo tipo de regalos que antes te negaban -lo cual está muy bien en caso de que sólo te estuvieses marcando un farol- pero si lo tuyo va en serio, estarán preparados para plantarte todo tipo de trampas en el camino.
Este artículo viene motivado por una experiencia propia bastante reciente: me mudé de domicilio y tuve que pasar por el terrible trance de dar de baja el ADSL en el antiguo. La compañía con la que tenía el servicio contratado, Movistar, intentó hacerme la 13-14 demorando mi baja durante 15 días pero, tras informarme el Sr. Google de mis derechos en la cuestión, logré que me diesen de baja sin más demora que 48 horas. Ahora que tengo los ánimos un poco más calmados, me he animado a poner por escrito unos cuantos consejos para los que queráis decirle adiós a vuestra compañía de teléfono.